jueves, 31 de octubre de 2024

QUÉ ACONTECIÓ REALMENTE EN LAS JORNADAS DE DICIEMBRE 2001 EN LA ARGENTINA

 


 

 

 

Rubén Rojas Breu

 

QUÉ ACONTECIÓ REALMENTE EN LAS JORNADAS DE DICIEMBRE DE 2001

 

Una versión antojadiza del gusto de las corporaciones y de los manipuladores de la politiquería es la que quedó en la memoria colectiva.

 

Esa versión, adoptada e impuesta por la derecha, por el progresismo, por el pejotismo, por el kirchnerismo y hasta por sectores de la izquierda y por las corporaciones mediáticas de todo el espectro político e ideológico es la siguiente:

 

“Se trató de una revuelta de la clase media enojada porque le habían licuado o sustraído sus ahorros”.

 

Toda una población, de muy buena fe, compró esa versión simplista y acomodada a los intereses más mezquinos.

 

Recomiendo desconfiar de quien propale versión tan inicua.

 

Milei acaba de degradar aquellas jornadas calificándolas de golpe de estado; con ese criterio, la Revolución de Mayo fue un golpe, no falta quien diga tamaña burrada.

 

Fui participante activo de esas jornadas, me movilicé con mi barrio y fui a Plaza de Mayo donde nos encontramos con la feroz represión, así que cuento de esto de primera mano.

 

Para comprender cómo se debe lo que pasó entonces parto de la recomendación de Ortega y Gasset de considerar de modo sistemático a la Historia, modo sistemático que desarrollan Cassani y Pérez Amuchástegui.

 

También me baso en mi creación más conocida, el Método Vincular, en el cual defino que deben abordarse todos los sucesos de un modo integral, vinculando lo que a primera vista parece desarticulado.

También sustento mi análisis en la premisa de la primacía de la Política.

 

Esa versión simplista que se adueñó de la opinión pública toma un hecho aislado, clase media enojada, y usando el pars pro toto, sinécdoque, aplica un dato parcial para dar cuenta del todo.

 

Las jornadas de diciembre del 2001 constituyeron una rebelión popular, crearon las condiciones para una situación revolucionaria, que el Régimen, ciertamente despótico disfrazado de democrático, buscó desesperadamente neutralizar.

 

Es desentenderse de la Política reducir tal levantamiento a una motivación económica, incurriendo en “economicismo”.

 

Veamos sistemáticamente las cosas, para lo cual articularé antecedentes o situaciones precedentes hasta el desemboque en el 19 y 20 de diciembre del 2001:

 

-     A tener en cuenta, el atentado de setiembre de ese año contra las Torres Gemelas en Nueva York, lo cual redefine la geopolítica y lo que suceda en cada país (no me extiendo sobre esto).

 

-     Las elecciones legislativas de octubre de 2001, en las cuales De la Rúa y los suyos, así como todas las dirigencias políticas, pierden estrepitosamente porque el triunfo de hecho fue para la abstención: voto en blanco, votos nulos que fueron masivos y no concurrencia.

 

 

-     En los meses siguientes crecen piquetes y también saqueos a supermercados por una población hambreada y excluida, sobre la cual el gobierno y sus aliados hacen interpretaciones caprichosas y paranoides, más allá de si el pejotismo o quien fuese alentasen o no tales acciones.

 

Toda esa movida estaba en auge el 19 de diciembre cuando se da el gran detonante, hoy muy olvidado, curiosamente: DE LA RÚA POR CADENA NACIONAL DECRETA EL ESTADO DE SITIO.

 

Decretar el estado de sitio causa lúgubres reminiscencias de las dictaduras y provoca los estruendosos y muy masivos cacerolazos en toda la Argentina, a lo cual sigue la represión feroz que culmina con casi cuarenta muertos, el raje de De la Rúa en helicóptero y su renuncia del 20 de diciembre.

 

Esas jornadas generarán las asambleas barriales, de las cuales participé, fui fundador de una de ellas, denominada Asamblea del Almacén.

 

En mi barrio, ciertamente popular, salieron a la calle con cacerolas y lo que tuviesen a mano miles de personas de la llamada clase media pero también, enfatizo, ciudadanas y ciudadanos desposeídas y desposeídos, okupas, pobres de toda pobreza, mal vestidas y mal vestidos, que brotaban de pensiones y casas ocupadas.

Minga de solamente clase media, minga.

Muchas de esas personas, también yo, no teníamos ahorros, así que ese relato deplorable es también difamatorio.

 

Al día siguiente me pide Antonio Cafiero, de quien yo era asesor, una reunión a solas para que le cuente mi análisis del cuadro de situación.

 

Se irritó por mi análisis ya que él consideraba que todo había sido una movida de las “señoras del aristocrático barrio de Recoleta”.

 

Pacientemente le demostré lo que había realmente sucedido y cuando ya había logrado que aceptara mi evaluación hizo pasar a sus colaboradores, todos los cuales venían armados ya del relato vacuo, apolítico y conveniente a los intereses dominantes y parido por la mediocridad de la que hacían gala.

 

Me queda mucho, muchísimo más para exponer, pero no quiero abusar más de la tolerancia de lectoras y lectores.

 

Dejo en claro que todo lo que vino después, gobiernos kirchneristas y gobiernos de derecha o ultraderecha incluidos, reacomodamiento oportunista de todas las dirigencias políticas y sectoriales, así como mayor avance de las grandes corporaciones, se beneficiaron de la versión simplista y licuaron lo que fueron jornadas francamente revolucionarias del Pueblo argentino.  

 

Cierro señalando que este análisis, además, sirve para entender mejor el calamitoso estado de cosas actual, en el seno del cual, gobernantes, politiqueros y poderosos muestran temor por la posibilidad de reedición de aquellas jornadas de 2001.

 

Conclusión: las jornadas de diciembre de 2021 no fue enojo de clase media.

FUE EL PUEBLO EJERCIENDO ACTIVO PROTAGONISMO.

 

Rubén Rojas Breu

Buenos Aires, octubre 31 de 2024


domingo, 27 de octubre de 2024

UNA CREENCIA CASTRADORA CORROE A LA ARGENTINA DESDE LA RAÍZ

 


 

Rubén Rojas Breu

 

UNA CREENCIA CASTRADORA CORROE A LA ARGENTINA DESDE SU RAÍZ

 

Pido disculpas por empezar con una descripción, a simple vista, escolar, pero es con un propósito: mostrar con un saque el potencial virgen con el contamos.

 

La Argentina ocupa un inmenso territorio, el octavo del mundo, extendiéndose desde sus fronteras norte con Bolivia, Paraguay y Brasil, hasta Tierra del Fuego y la frontera sur con Chile; sumando su parte de la Antártida llega a casi 4.000.000 km² A eso cabe añadir la plataforma continental del sur del Atlántico Sur que por indiscutibles derechos le corresponde lo cual agrega más de 6.000.000 de km²

 

Es el país de habla hispana más extenso del planeta.

Con casi 50.000.000 de habitantes se halla insuficientemente poblado; de todos modos, es un número suficiente para proponernos lo más, por la cantidad y calidad de su población.

 

Nuestra población, pese a tanto viento en contra, cuenta con una tradición política única en el mundo, excepcional, con un alto grado de alfabetización y nivel cultural y educacional más que destacables, reconocido por los famosos Índices de Desarrollo Humano de Naciones Unidas, causante de frustración ya que tenemos una preparación que está muy por encima de la recompensa.

 

 

Nuestra extraordinaria y excelsa educación pública es artífice de tamaño logro, pero es constantemente avasallada por las hordas como acontece actualmente.

 

 

Tenemos todo para aspirar a constituirnos en una nación plenamente desarrollada, de avanzada, que asegure pleno bienestar para quienes la habitan y para alcanzar una posición relevante o líder en el mundo, una posición de gran proyección internacional que implique una participación protagónica para incidir geopolíticamente, posición que no terminamos de advertir que los pueblos oprimidos del planeta nos reclaman con el fin de impulsar la paz, la justicia y la solidaridad en el plano internacional y la interacción fructífera entre estados y naciones.

 

De tal manera, con tanto sin realizar, con tanto desperdiciado o, peor aún, entregado a los Estados dominantes, con yanquis en primer lugar y a las grandes corporaciones globales y a nuestra sempiterna oligarquía, somos como un gigante amo de un descomunal palacio, circundado por fastuosos jardines, recluido en el altillo más recóndito y oscuro de tamaña edificación.

 

Es como si padeciéramos una suerte de “complejo de Segismundo”, en referencia al protagonista de “La vida es sueño” de Calderón.

 

 

Con su muerte, Perón se llevó el inconcluso Proyecto Nacional, ambicioso y a la altura de lo que debería ser nuestro destino.

 

Después de la dictadura terrorista y depredadora, se alternaron gobiernos civiles que oscilaron entre políticas paliativas de corto alcance y finalmente empobrecedoras, con gestiones claramente al servicio de la voracidad de los poderosos vernáculos y globales que nos someten a ajustes brutales, como el que implementa el actual gobierno despótico libertario encabezado por la fratria megalómana y despiadada con sus huestes vandálicas.

 

No tenemos ni tuvimos gobiernos a nuestra altura; dirigencias y gobiernos mediocres o gobiernos abiertamente antipopulares y antinacionales nos mandan todo el tiempo al altillo: algunos con polenta, colchón y frazada, otros con grilletes.

 

Nos sepultan en la opción “migajas o palos”.  

 

Deberíamos contar con un Proyecto de gran alcance que se plasme en un desarrollo de enorme magnitud poniéndonos en el más alto nivel, ubicándonos entre las diez naciones más avanzadas del planeta.

 

Sin embargo, una creencia castradora, tozuda e inconsciente nos corroe desde la raíz: la de que nuestro inexorable destino es la de ser un paisito, un país pequeño y pobre, la creencia de que no nos merecemos más; ni siquiera hay conciencia de lo achicados que estamos.

 

Palabras como “pobreza”, “indigencia”, “sacrificio” y “deuda” o frases como “otra no hay”, “no se da más, pero hay que aguantar”, etc. forman parte del lenguaje cotidiano.

 

 

Tan deprimentes palabras y frases revelan que se naturaliza el atraso, la injusticia, la pobreza, el sometimiento.

 

De todos modos, en medio de tanta pálida, es esperanzador ver en las marchas la consigna “La patria no se vende” o movilizaciones como las que se llevan a cabo en defensa de la educación pública, de la salud pública, de jubiladas y jubilados, por reivindicación de tantos derechos conculcados.

Pero no alcanza, hace falta más, mucho más.

 

Como consecuencia de esa castradora creencia, de impronta fuertemente endogámica, también se achica el mundo.

 

De tal manera, para dirigencias, gobiernos, medios masivos de comunicación, empresas encuestadoras, intelectuales y gran parte de la población, para felicidad de las grandes corporaciones y de los hacendados que ya se perpetúan por siglos, el mundo está constituido por nuestro empequeñecido país y por los EEUU de Washington.

Del resto del planeta, ni noticias, salvo guerra o catástrofe.

 

Se hace perentorio construir una CONDUCCIÓN POLÍTICA QUE DISEÑE Y PLASME UN PROYECTO DE EMANCIPACIÓN Y REALIZACIÓN DE NACIÓN Y PUEBLO.

 

Reitero enfáticamente:

superemos creencias tan castradoras y apuntemos a hacer de la Argentina una de las diez naciones más avanzadas del planeta con pleno desarrollo, con bienestar y justicia hacia adentro y con una proyección de máxima relevancia hacia afuera, hacia el mundo.

 

No habrá satisfacción posible hasta lograrlo.

 

Rubén Rojas Breu

Buenos Aires, octubre 27 de 2024


jueves, 24 de octubre de 2024

RECOMENDANDO LA SERIE ALEMANA "EL CÓDIGO QUE VALÍA MILLONES"

 



 

 

Rubén Rojas Breu

 

POR QUÉ RECOMIENDO LA SERIE ALEMANA “EL CÓDIGO QUE VALÍA MILLONES”

 

Esta excelente serie alemana cuenta con una entusiasta aprobación en el mundo por la temática, por su producción, por su libreto, por su dirección y por sus actuaciones; sobre todo, por la temática que es del mayor interés para quienes tenemos conciencia política y estamos del lado de las causas justas, en contra del despotismo global y sus sucursales vernáculas.

 

Obviamente, la serie no es del gusto ni de los yanquis ni de sus secuaces en el planeta como “nuestros libertarios”.

 

El tema es el plagio que, impunemente, Google para su “Google Earth” hace del programa de dos desarrolladores jóvenes alemanes hace un par de décadas, quienes habían creado el “Terra Vision” en 1993. Google arranca en 1996, así que los jóvenes alemanes llevaban claramente la delantera.

 

Estos jóvenes, demandan a Google con sobrados fundamentos y pruebas.

 

Como es sabido, Google ocupa el podio de empresas de mayor penetración y facturación en el mundo y es una de las cinco empresas tecnológicas dominantes del planeta.

 

Por supuesto, es el Goliat de esta historia contando a su favor con todo el poder político y económico, todo el gigantesco aval para hacer lo que se le ocurra que pueda imaginarse por ser yanqui y, para el caso, con bufetes de abogados nada escrupulosos y sí muy arrogantes.

 

También, como puede verse en la serie, Google tiene a su favor el Poder Judicial yanqui, nada encomiable por cierto y el mismo que nos tiene a los argentinos a mal traer con la ilegítima deuda externa y la entrega persistente de nuestros recursos por obra de nuestros mandamases cipayos.

 

El juicio genera indignación por la prepotencia de los abogados de Google, porque el juez está pintado y, desde luego, puesto ahí para inclinar la balanza del lado de sus amos connacionales; pero, así me sucedió, la bronca se hace mayúscula porque el jurado está integrado por doce analfabetos informáticos que miran a abogados, testigos y denunciantes con caras que trasuntan la pregunta “¿qué hacemos nosotras y nosotros aquí?”.

 

Es decir, no entienden una pepa y resuelven bien a la manera yanqui, bien a la manera de los absurdos juicios por jurados, una modalidad que remite a la barbarie y que ya he objetado y descalificado con sólidos argumentos en varias publicaciones.

 

La serie deja en claro cuántos emprendedores a lo largo y ancho del planeta han sido afectados, plagiados, por este Goliat de nuestra época, que se termina saliendo siempre con la suya.

 

Deja en claro, en lo particular, a quiénes sirven infamemente Milei y la horda libertaria.

 

En fin, para interiorizarse, para espabilarse en cuestiones decisivas del mundo actual, para debatir y para tener más claridad sobre quiénes nos oprimen.

 

También nos da una mano para nuestra causa en favor de los pueblos, en favor de la emancipación y para refutar tanta patraña, tanta opinión berreta y tanta barbarie que soportamos de parte del gobierno despótico libertario y sus cómplices.

Es una serie alemana, del llamado Primer Mundo.

Si ellos denuncian…

 

Rubén Rojas Breu

Buenos Aires, octubre 24 de 2024

  

 


martes, 22 de octubre de 2024

SOBRE LA VIOLENCIA PRESIDENCIAL EN LA ARGENTINA

 


Rubén Rojas Breu

 

VIOLENCIA ES TODO EL PROGRAMA LIBERTARIO

MI REPUDIO AL ATAQUE DEL PRESIDENTE AL KIRCHNERISMO Y SU LIDERESA

 

Quien esté al tanto de mi trayectoria política, como militante y como dirigente, así como de mi producción científica y mi carrera profesional, sabe que mis diferencias con el kirchnerismo son abismales. Lo mismo vale con respecto a la distancia que me separa de la izquierda y del progresismo.

 

Aclarado el punto, señalo:

 

1.    Que considero a quienes pertenecen a esas corrientes y fuerzas políticas compañeras y compañeros que comparten conmigo la aspiración a la emancipación y realización de nación y pueblo,

 

2.    Que lo que voy a exponer sobre la violencia presidencial y libertaria, además de reflejar mi posición política sobre algo crucial, es una expresión de solidaridad y una demostración cabal de objetividad toda vez que no pertenezco a tales espacios.

 

 

El caudillo libertario, su LLA y sus aliados incondicionales, tienen como único y acabado programa el ejercicio de la VIOLENCIA.

 

Violencia a través del ajuste brutal, violencia a través de la destrucción de la educación y salud públicas, violencia a través de demolición de la industria, de la ciencia y de la tecnología, violencia a través de la entrega, violencia a través de la caída de salarios y jubilaciones, violencia a través de la represión salvaje de toda manifestación popular, violencia a través de su política internacional, violencia a través de bravatas en medios de comunicación y redes virtuales, violencia a través de amenazas, antecedidas por el intento de asesinato de la lideresa kirchnerista hace dos años.

 

Por qué ese caudillo, acompañado por su comunidad de energúmenos, está donde está.

 

La dictadura se propuso destruir, con su plan exterminador, a la Política, al Pueblo y a la soberanía nacional.

 

Después del primer gobierno civil post dictadura, encabezado por Alfonsín, el menemismo llevó a cabo un plan para arrasar con nación y con pueblo, para liquidar a la Política, a las organizaciones políticas y para aniquilar hasta el último vestigio de cultura política.

Los gobiernos que vinieron después no advirtieron este proceso e, inclusive, inconscientemente o no del todo, lo alentaron.

 

Es así que desde la dictadura y luego con el menemismo, cobra protagonismo la masa, la llamada “mayoría silenciosa”, en desmedro del Pueblo.

 

Del seno de la masa, ya generada por la dictadura, sus tenebrosos grupos de tareas y alentada descaradamente por el menemismo, emerge la HORDA.

 

 

Esa horda se fue evidenciando y así sigue, con los violentos de género, incluyendo abusadores y feminicidas, con el gatillo fácil, con la violencia criminal, con el auge de los narcos, con faranduleros y faranduleras desaforados y desaforadas que hicieron y hacen gala de salvajismo en televisión y redes, con patoteros y barrabravas, con el crecimiento de población lumpen que se ensaña con los pobres y con tanto más que se agregue a esta incompleta lista.

 

Esa horda buscó desde su origen alguien que la represente, pasando por las opciones de derecha que le parecieron insuficientes, hasta dar con el actual caudillo libertario por obra de deleznables programas de televisión y las redes.

 

Esa horda sintoniza con la descomunal penetración cultural yanqui que posee un amplísimo espectro que va desde el culto de los fascistoides superhéroes hasta extendidas costumbres abiertamente deshumanizantes.

 

Esa horda arrastró a la masa manipulando a esta con promesas de que, a través del ejercicio de la crueldad, a través del castigo, a través de la hostilidad a lo nacional, a lo popular, a los pobres, a trabajadoras y trabajadores conscientes de sus derechos, encontrarían su felicidad canalizando resentimiento y odio cerril sin esforzarse y sin comprometerse políticamente.

 

Agreguemos que con su amenaza de este domingo 20, justamente el día de la Madre, les aporta una prueba a quienes lo denuncian por plagio ya que copia a Herminio Iglesias, quien, en el acto de cierre de campaña de un ya degradado peronismo en octubre 1983, se paseó con un ataúd que contenía un muñeco que asemejaba al líder radical.

 

Los actos violentos, las incitaciones e iracundia de Milei, sobreactuaciones planificadas incluidas, tienen un doble propósito:

 

Uno, revalidar ante la horda su función de representante ya que la misma es adicta la violencia a la manera en que Drácula lo es a la sangre

 

Dos, intimidar a la población, a quienes se movilizan, a la oposición y a todo lo que obstaculice el paso de la horda.

De tal manera, se trata de debilitar a la horda.

 

A la horda se la debilita construyendo la conducción política, generando organización política y regenerando la cultura política.

 

Una manera de empezar es una amplia convocatoria contra la violencia, contra la violencia que va desde el ajuste sanguinario y la represión salvaje hasta tanta manifestación verbal y no verbal de brutalidad verbal, tanta coprolalia, tanta grosería.

 

Por su parte, el Poder Judicial y los constitucionalistas tienen que hacer lo que les cabe.  Veremos.

Rubén Rojas Breu

Buenos Aires, octubre 22 de 2024

 

 

 

 


sábado, 19 de octubre de 2024

RESPONDIENDO A UNA SOLICITUD DOS ANUNCIOS

 



Rubén Rojas Breu

 

DOS ANUNCIOS

 

Primer anuncio:

Por el impulso de una compañera y un compañero que, con auténtica generosidad, ponderan el valor de mis aportes, decidí volver a publicar.

 

A tal impulso se suma el estímulo proveniente de personas que manifiestan expectativas respecto de lo que pueda yo decir, habida cuenta de las penosas circunstancias que estamos viviendo argentinas y argentinos, acuciadas y acuciados por el desgarro causado por el debilitamiento de nuestra patria y por la desesperación, la injusticia, la postergación inacabable, el atraso, la hambruna que afecta, sobre todo, a niñas, niños, adolescentes, ancianas y ancianos.

 

Con tal cuadro pavoroso asistimos, para mayor pena y desazón, a algo que tiene bastante de escandaloso; la oposición dizque “justicialista” está migrando de la inacción de casi un año a un internismo desaforado, extemporáneo y derrotista.

 

Piensan en un futuro electoral, para dentro de un año, sin tener en cuenta, parafraseando a Keynes, que para ese todavía lejano futuro “estaremos muertos” dada la depredación acelerada a la que nos somete el gobierno despótico.

 

Queda claro que estas y estos internistas son incapaces de conducir y de organizar a todo un pueblo. Ni siquiera atienden a las movilizaciones de jubiladas y jubilados, de estudiantes, docentes y no docentes de las universidades públicas, de trabajadoras y trabajadores en distintos puntos del país.

 

Dejan al Pueblo, porque ése es el Pueblo, en absoluta soledad; peor aún, con sus internas le roban protagonismo a nuestro Pueblo, al mismo tiempo que promueven la desmovilización, la resignación o la parálisis.

 

Por lo tanto, dado tan dramático estado de cosas y, sobre todo, respondiendo al impulso de compañeras y compañeros verdaderamente comprometidas y comprometidos, vuelvo a publicar.

 

Me han convencido de que aún cuando la repercusión de mis producciones tenga limitado alcance, por la calidad de quienes valoran mis contribuciones, el intento vale.

 

Ante tanta demostración de solidaridad y de preocupación por nuestro destino, sería irresponsable y egoísta de mi parte no aportar.

 

Segundo anuncio:

Quienes me han impulsado a publicar nuevamente, con sólidos argumentos, con honestidad y con grandeza, me proponen hacer todo lo posible para que mis publicaciones alcancen la mayor repercusión, el mayor alcance, compartiéndolas, difundiéndolas, haciéndolas llegar al mayor número de destinatarias y destinatarios posibles.

 

Coincidimos en que muchas argentinas y argentinas, a la decadencia que padecemos, se suma el agobio por la falta de ideas, por la falta de un rumbo, por la falta de creatividad en un contexto en el que lo que sí abundan son los lugares comunes, los debates mediocres y repetidos, la atracción paralizante por el encuestismo, todos esos vicios alentados por los concentradores y factores de poder vernáculos y globales.

 

De tal manera, vuelvo a publicar también por este motivo: que sirva para generar nuevas corrientes de pensamiento y de acción que lleven, ojalá más temprano que tarde, a generar la conducción política y la organización política que nuestra Nación y nuestro Pueblo requieren imperiosamente.

 

Para allí vamos.

 

Rubén Rojas Breu

Buenos Aires, octubre 19 de 2024

miércoles, 9 de octubre de 2024

SOBRE EL VETO DE LA LEY DE FINANCIAMIENTO UNIVERSITARIO EN LA ARGENTINA

 


Rubén Rojas Breu

 

PORQUE EMPATIZO CON EL PROFUNDO MALESTAR COLECTIVO Y PORQUE ME HAGO CARGO

A PROPÓSITO DEL VETO

 

Según el diccionario de la RAE, empatizar es “sentir empatía”, palabra ésta que significa “capacidad de identificarse con alguien y compartir sus sentimientos”. Así que empatizo.

 

Al mismo tiempo, me hago cargo del malestar colectivo para cumplir las funciones que dejan vacantes las y los dirigentes que se dicen representantes del pueblo y los trabajadores: me hago cargo, entonces, para cumplir las funciones de contener, de orientar y de conducir.

 

-     Mi trayectoria política y mi férreo compromiso con la educación pública,

-     y toda una vida transcurrida en las aulas de nuestra eximia educación pública y en particular, como estudiante primero y como docente después en la UBA y otras universidades estatales,

hacen que me desdiga, por esta vez, de mi decisión de no publicar más.

 

Dos conclusiones definitorias se imponen a partir del bochornoso aval de los diputados al veto de la ley de financiamiento universitario:

 

Una, el divorcio terminal entre el Congreso y las dirigencias de un lado y el Pueblo del otro lado,

 

Dos, que se torna un imperativo perentorio el de diseñar una estrategia novedosa y eficaz

 

El veto expresa un triunfo ocasional de la brutalidad y el oscurantismo sobre la cultura y la justicia.

 

Quede claro: los diputados que apoyaron al gobierno autocrático encabezado por un déspota de cartón merecen todo el repudio, lo cual es seguramente compartido por quienes lean estas líneas.

 

Pero también hay que decir que quienes se opusieron al veto, así como las dirigencias a las que representan, han demostrado una ineficacia exasperante, por enésima vez.

 

Fueron ineficaces cuando gobernaron para generar el desarrollo y sacar a la Argentina del atraso y de la pobreza, fueron ineficaces para impedir el acceso al gobierno de un patotero ridículo y cheto con la horda que lo empuja y son ineficaces para poner freno a tanto desatino cruelmente descargado sobre las espaldas agobiadas de la gran mayoría de las argentinas y de los argentinos, hambreadas y hambreados, hundidas y hundidos en la desesperación.

 

Hoy mismo, con este veto, las mayorías sienten desazón, desaliento, angustia para continuar una lucha que se presenta con mucho en contra o buscan sacar fuerzas para tratar cada día de sobrevivir.

 

El caudillo libertario, con un gobierno grotesco en sus manos, cursó primaria, secundaria y universidad en organizaciones privadas y egresó como economista con una formación académica de bajo nivel, carente de toda reputación en la Argentina y en el mundo.

 

Esa pobrísima formación da cuenta de su resentimiento con la educación pública y, en particular, con la UBA, la cual le queda sobradamente grande e intelectualmente inaccesible.

 

Pero no quiero incurrir en la personalización; sólo hice esa observación para no caer en el careteo al que obliga el “pensamiento político correcto”.

Este caudillo alardea de lo que carece, mostrando megalomanía y coprolalia aunadas con una crueldad que aterraría a Calígula y a Nerón.

 

 Es inaudito que la oposición no pueda sofrenar a alguien tan endeble y a la horda que lo encaramó allí.

 

Justamente en gran medida el veto se materializó porque faltó una estrategia y porque no se visualizó cuál era el conflicto de fondo. Por lo mismo, por parte de las dirigencias mismas que impulsaron la movilización por la educación pública universitaria se devaluó, una y otra vez, esa movilización del mismo modo que lo hicieron con la lucha de los jubilados.

 

Una estrategia novedosa y eficaz para este presente tan espantoso, para poner fin a un estado de cosas tan calamitoso, implica ya:

 

-     La construcción de una conducción política

 

-     Esa conducción política tiene que proponer e impulsar un Proyecto con su corto, mediano y largo alcance.

 

 

-     Dicha conducción política tiene que elevar a grandes alturas la movilización popular mostrando la trascendencia de las luchas por las jubilaciones, por la salud pública y por la educación pública.

 

-     El Proyecto debe contener formulaciones claras y viables para el desarrollo, desarrollo que contemple la cultura, la ciencia, la tecnología, la industria, el empleo digno hasta el último rincón del país, el cuidado ambiental, la justicia social, la soberanía política y una economía al servicio de la nación y del pueblo y, desde luego, la creciente democratización.

 

 

-     La primera tarea de esa conducción política debe ser la convocatoria de la gran mayoría de los actores y sectores reeditando, aggiornadamente, aquella Hora del Pueblo de 1972 que tuvo al peronismo con Perón liderando y que incluyó al radicalismo y otras fuerzas políticas, así como las grandes organizaciones sectoriales.

No digo esto con ánimo partidista, no es lo mío.

Me baso en las expectativas manifiestas y latentes de las mayorías, en mi nutrida experiencia política de décadas y en las enseñanzas de la Historia.

La convocatoria debe tener una amplitud sin precedentes.

Mezquindades, egocentrismos, especulaciones, cálculos de baja monta, miradas de corto alcance, sectarismos, análisis simplistas, seguidismos de encuestas y de consultoras, liderazgos ya fracasados o sobreprometedores, sometimiento a la prédica esterilizante o idiotizante de medios y de redes,

NO SIRVE, NO VA MÁS.

 

Así que la pregunta cardinal, dilemática, que dejo picando es:

 

¿Nos dejamos seguir avasallando y empobreciendo

o

QUEREMOS UNA ARGENTINA Y UN PUEBLO LIBRES QUE SE REALICEN EN PLENITUD, de una vez por todas?

 

Rubén Rojas Breu

Buenos Aires, octubre 9 de 2024

 

 

 

 

 

 


QUÉ ACONTECIÓ REALMENTE EN LAS JORNADAS DE DICIEMBRE 2001 EN LA ARGENTINA

        Rubén Rojas Breu   QUÉ ACONTECIÓ REALMENTE EN LAS JORNADAS DE DICIEMBRE DE 2001   Una versión antojadiza del gusto de ...